La puerta principal se abre a un amplio recibidor con acceso a un aseo y a un práctico lavadero equipado con dos lavadoras, una secadora y armarios empotrados

Unas preciosas puertas de cristal dan acceso al espacioso salón-comedor, donde te sorprenderá de inmediato el espectacular techo con vidrio pisable y las fantásticas vistas a través de las diversas ventanas y puertas francesas.

Este espacioso y luminoso salón ofrece el marco perfecto para cada momento. Comience el día con un desayuno en familia mientras el aire fresco de la montaña entra por las puertas francesas. Por la noche, disfruta de largas cenas con amigos o relájate en el sofá, junto al calor de la estufa de pellets, para una relajante noche de cine.

Las puertas francesas del comedor dan a la amplia terraza. La terraza orientada al sur ofrece estupendas y amplias vistas sobre el valle y las impresionantes cumbres de los Pirineos. En verano, es un lugar agradable para relajarse al sol. En invierno, disfruta del paisaje nevado con un plaid y una bebida caliente.

La amplia cocina es nueva y está totalmente equipada con placa de inducción, 2 hornos, lavavajillas, microondas, frigorífico y congelador. También hay un montón de espacio de trabajo, espacio de almacenamiento y suficientes enchufes para aparatos de cocina. La cocina está diseñada para servir comidas a los huéspedes de pago.

En la primera planta se encuentran cuatro espaciosos dormitorios con baño en suite, organizados alrededor de un amplio distribuidor. El suelo con vidrio pisable es un auténtico punto de atracción en la sala.

Las cuatro habitaciones están cómodamente equipadas para dos personas, tienen baño privado y balcón. Gracias a esta configuración, la casa es ideal como vivienda familiar, pero también perfecta para su uso como hostal (B&B).

Los balcones ofrecen magníficas vistas sobre el valle y las demás casas de esta pequeña urbanización situada al margen de un pueblo histórico.

Oportunidad única: al lado de Casa Cristina hay una casa de tres dormitorios. Casa Cristina tiene licencia de alquiler turístico. Para los interesados en explotarla como hostal, esta opción de segunda vivienda independiente es ideal. Esta casa se vende exclusivamente junto con Casa Cristina. ¿Quieres saber más sobre esta opción? Ponte en contacto con nosotros.
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Vea la tour virtual de la casa aquí. También es posible ver la propiedad juntos para que podamos explicar y responder a las preguntas directamente. En ese caso, póngase en contacto con nosotros.
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La Ribagorza – en el corazón de los Pirineos

Casa Cristina está situada en la comarca de la Ribagorza, en la zona limítrofe entre Aragón y Cataluña, entre los valles de Benasque y Boí. La zona es un oasis de calma, espacio y aire puro de montaña, con una naturaleza espectacular que invita a salir al aire libre.

En verano, se puede practicar senderismo, bicicleta de montaña, escalada, vías ferratas o parapente. Los ríos y lagos de montaña ofrecen muchas oportunidades para bañarse, practicar rafting o simplemente relajarse junto al agua. En invierno, puedes disfrutar de las pistas de Cerler o Boí Taüll, dos estaciones de esquí bien equipadas y sin turismo de masas.

La cultura también está cerca: las iglesias románicas de la Vall de Boí, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, son testimonio de una rica historia. Añada la gastronomía local y tendrá un lugar donde la naturaleza, el deporte y la cultura se dan la mano – en todas las estaciones.

En la zona hay tres impresionantes parques naturales: El Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, con sus profundas gargantas y espectaculares cascadas, el escarpado Aigüestortes, con lagos de montaña de aguas cristalinas y picos de granito, y el Parque Natural de Posets-Maladeta, donde se encuentra la montaña más alta de los Pirineos: el Aneto (3.404 m). Ideal para practicar senderismo, escalada y disfrutar de la naturaleza virgen.

Por tierra, agua y aire: la zona ofrece amplias posibilidades para practicar deportes activos al aire libre como senderismo, escalada, bicicleta de montaña, parapente, kayak y barranquismo – todas las estaciones y todos los niveles.

En invierno, la zona se convierte en un paraíso para los amantes de los deportes de invierno. Boí Taüll, es una estación de esquí tranquila y bien organizada en pleno Parque Nacional de Aigüestortes. Cerler, cerca de la concurrida localidad de Benasque, es más grande y variada, ideal tanto para esquiadores de pista como para freeriders. Los esquiadores de fondo pueden dirigirse a Llanos del Hospital, donde pistas bien mantenidas serpentean por el paisaje nevado del Parque Natural Posets-Maladeta.